martes, 16 de julio de 2013

Rayos, truenos y centellas

El viernes pasado vi la primera cosechadora en el campo recogiendo  la espléndida cosecha de cereales que este año promete. Ha sido muy lluvioso el 2013 propiciando  que los cultivos de secano crecieran sin problemas bajo la mirada feliz del labrador que hizo la siembra. Sí, todo parecía ir sobre ruedas pero la "lotería" de piedra y granizo "tocó" por Villamartín de Don Sancho, Villaselán, Villazando de Valderadue, Cea, Villamón Santa María del Monte Cea,  y arrasó en 20 minutos el trabajo de todo un año, precisamente cuando las máquinas, a punto ya, apenas habían comenzado a trabajar.

Todo un año de trabajo e ilusiones al traste
En otoño comienza el milagro: el labrador planta con todo su afán  y entusiasmo la semilla, esta se va descomponiendo y germinando, de cada una pueden salir hasta diez  brotes  que desarrollaran diez cañas con su espiga final de hasta ochenta granos en cada una.  Así  un grano inicialmente sembrado podría  darnos en un contexto ideal  800 en una primera cosecha. ¿Quién puede decir que no es un milagro?

Pero igual que las fuerzas de la naturaleza obran el milagro del grano convertido en nuevas espigas, también ellas pueden obrar el desastre, la destrucción y la pérdida, como hemos visto muchas veces y constatamos ahora en esos pueblos cercanos ya apuntados.  A veces, predicaba D. Ramón el viejo cura: pensamos que con nuestra tecnología y nuestros adelantos ya nada se nos va poner por delante y tienen que venir de vez en cuando a avisarnos de lo muy equivocados que estamos. Es cierto,  hay muchos inventos, como dicen en mi pueblo, pero solo la naturaleza es capaz de fabricar-crear, un grano que germine y,  también de malograr la cosecha por mucho que intentemos evitarlo.  deberíamos ser más humildes, más humanos,  sin necesidad de que la realidad nos  venga a recordar nuestro límite y fragilidad. 

Con afecto y cariño para esos agricultores que han perdido su cosecha, y más cuando parece ser que la cobertura de riesgos ha bajado, entre otras cosas por retirada de subvenciones de ayuda para seguros agrarios de la Junta y la bajada en el mismo sentido de las del Ministerio de Agricultura. A ver si ahora la Junta  y el Ministro, suben un poco sus preocupaciones por ayudarlos que bien se lo merecen.
                                 Buen verano

Begoña: Mercería y lencería. Atención y precio a su servicio.
En el cruce de la C/. Serna con  C/.San Pedro.

Transportes del Río -Isaac y Alvaro- Transportes Gelo.
Seriedad, economía y eficacia.

Hostal, mesón el Gallo, Mansilla de las Mulas. 
El placer de lo bien hecho.- Pollo campero criado por Grabiel -



viernes, 12 de julio de 2013

Un buen negocio

Estamos en pleno verano, hay muchas personas de vacaciones, otras que irán más tarde y también lamentablemente, demasiadas que no las podrán tener porque su situación económica se lo impide. Dicen los psicólogos que la vacación más que dejar la actividad de lo que se trata es de cambiar de ocupación, de decorado. Puede que tengan bastante razón. Sí,  no dudo que será bueno que cambiemos el chip del mosqueo por tanta corrupción e injusticia por pensamientos  más positivos. Lo negativo suele ser lo que más noticias genera en los medios de comunicación, también en este humilde blog la mayoría de comentarios son para conductas negativas.

Hoy, por cambiar, quisiera detenerme en lo positivo que la vida nos puede deparar.  El rellano de las vacaciones puede ser buen momento para meterse con algún libro. Me viene a la memoria un libro que leí hace unos cuantos años: CAMINO DE SENCILLEZ, de la madre Teresa de Calcuta fallecida en 1997.  No fueron sus connotaciones religiosas, de las que por supuesto está lleno, fueron sus detalles humanos, sus ejemplos de saber estar, las que me impactaron. Está plagado de frases que encierran toda una filosofía, una forma de vivir: "ayudando a alguien uno se puede estar ayudando a si mismo", "cuando te preocupas por la vulnerabilidad de los demás en lugar de por la tuya te vuelves menos vulnerable", "el día es demasiado corto para ser egoísta"…

Continuamente oímos que el que triunfa es el sinvergüenza, el egoísta, el malo. Bueno eso depende de lo que entendamos por triunfar. Si triunfar es vivir como un marqués amontonando dinero y poltronas, seguramente es verdad. Pero si triunfar es sentir las sensaciones más gratificantes de nuestro interior, la paz y la serenidad aún con los grandes y graves problemas que la vida conlleva, si triunfar es tener gente  que te quiera, gente que al mirarla te demuestre su ternura sin palabras; entonces te pueden venir bien esas frases del libro apuntado.

Si para ti el amor, la amistad; son más importantes que cualquier capital material, no lo dudes: ser bueno puede ser un buen "negocio". Bueno, no tonto. Buen  verano.



lunes, 8 de julio de 2013

Metidos hasta el cuello

Eran los años sesenta, en un pueblo vecino al mío, una buena mujer muy trabajadora vivía con su marido Ruperto y sus tres hijas guapas y en edad de merecer aunque un poco escuálidas,  por las circunstancias. Criaba la señora muchas gallinas, cerdos, conejos… pero tenía la manía de no catarlos por hacerlos dinero.  Aquel año hizo una excepción y el día de la fiesta preparó un conejo.  Tal fue el acontecimiento, que así lo contaba al día siguiente a sus vecinas en los corrillos: “Pues  matamos un conejo y los echamos con patatas, ¡Jamía, pero que sostanciaaa!  Las chicas comían patatas y patatas,  Ruperto,  ¡Huy Ruperto!¡Yo creí que reventaba!”


En  922.000 millones de euros está endeudada España, por encima del 88% del PIB. Es cierto que se han hecho muchos recortes y subidas de impuestos pero aun así la deuda ha crecido en el primer trimestre de este año más de un 4%.  La Administración General del Estado debe  796000 y ha gastado ese trimestre un 21,5 % más  que en el mismo periodo de 2012. Las comunidades autónomas deben cerca de 200.000 millones de euros y siguen despilfarrando  con un repunte de su deuda del 29,5%. Los ayuntamientos  42.000 millones de deuda con una subida  del 16%

¿Cuándo y cómo vamos a empezar en serio a  cortar esta sangría? Estamos pagando al día más de 100 millones de intereses por la deuda. Hay mucho economista y catedrático, no sé en qué, que dicen que la culpa la tiene Europa que no nos deja más dinero. Nosotros a seguir gastando más de lo que producimos, despilfarrando y ellos nos tienen que seguir prestando. Lo intento, pero no comprender a semejantes "talentos".

Entre la tacañería y los gastos superfluos: AVES sin viajeros, aeropuertos  sin vuelos, embajaditas, asesores, duplicidades, incompetencias; amén de compadreo, trapicheo, el pringue…, debe haber un término medio de seriedad, competencia y responsabilidad. Será mejor que nos enteremos, no sea que pasemos de comer “bien” muchos días, a solo una vez al año y no por voluntad propia, como aquella buena mujer del vecino pueblo.

miércoles, 3 de julio de 2013

Abajo las manos

Baje las manos, nos decían a los chavalines de 12, 13, 14, años, los directores del colegio donde yo estuve  interno.  En la mayoría de los casos sin uno proponérselo  estas se iban a proteger la cara cuando se avecinaba una buena bofetada.  Así  intentado engañar a nuestras  manos protectoras al final acababa la palma "enemiga" castigando nuestro rostro.  Esto era algo muy rutinario y muy normal: por hablar donde no debías, por correr, por llegar tarde, por una mala nota... La única alternativa que nos quedaba era acordarnos por lo bajo de su familia y a espabilar para evitar sucesivas.

Dice hoy la prensa que un fiscal pide un año de cárcel a un padre zaragozano por dar una bofetada a su hija de 16 años. Tenían una discusión en casa porque el progenitor se negaba a pagarle la reparación de un teléfono móvil. Parece ser que la niña empezó a dar patadas, portazos,  y el  padre la propinó el tortazo. El fiscal lo tipifica como un delito de violencia doméstica y pide un año de cárcel.

Recientemente  al juez Elpidio, por meter en la cárcel a Blesa, expresidente y presunto estafador   de  Caja Madrid, la entidad  que ha arruinado a millares de familias; le están buscando las cosquillas de su presente y pasado  y hasta el fiscal del caso ha defendido al acusado que han sacado de prisión en volandas. Algo parecido está ocurriendo con la jueza Olalla Domínguez que lleva el caso de la trama de los ERES, más de 100 millones "desviados". Hasta ahora parece que la habían respetado un poco, pero ha imputado a Magdalena Álvarez, exministra y exconsejera de la Junta, a continuación lógicamente iría Griñan. Amigo mío eso los socialista parece que no lo pueden soportar, la Valenciano y demás  ya a conspirar contra la juez: que si está emprendiendo una  causa contra Chaves y Griñan, que si es incomprensible que impute a Magdalena...

Con todos estos tejemanejes que vemos a diario pretenden que creamos en los jueces, en los fiscales, en la justicia. Pues no; está claro que la justicia no es igual para todos. Siempre ha habido fallos pero es que son siempre en el mismo sentido y con las mismas personas. Nunca he sido partidario de la violencia, ni de la bofetada, menos a niños, por más que recibiera algunas, aunque no de mis padres; pero de ahí a que se pida un año de cárcel para este hombre de Zaragoza…  ¿Y a este fiscal no le buscan las cosquillas como al  juez Elpidio a ver si está loco?

martes, 2 de julio de 2013

Todo un verano de rebajas

Iba el otro día en el coche cuando oí un anuncio que me sorprendió: aprovéchate comienzan las mejores rebajas del verano. Pero estos están mal de la cabeza, me dije, si acaba de comenzar el verano, hasta hace dos semanas todavía hacía un frío que pelaba. Estas no son rebajas de verano, es todo un verano de rebajas.

Recuerdo lo largos que eran aquellos veranos de mi infancia y adolescencia, todo el día en el campo y en la era. Aquellas jornadas que, después de haber acarreado muy temprano la mies, nos tirábamos  en el trillo dando vueltas con la pareja de vacas desde las once o las doce de la mañana hasta las últimas horas de la tarde con apenas descansos para la comida y la merienda.  La hora de la comida la anunciaban subiendo a tocar campanas algún vecino de aquellas eras cercanas a la iglesia. La merienda aparecía por el camino de manos de la madre después de que uno llevara varios minutos mirando a ver si llegaba. La verdad es que no sabría decir que se esperaba  con más impaciencia: si la comida o merienda en sí, o el pequeño descanso que ello significaba.
de precio y calidad de vida

Ahora vivimos demasiado de prisa. Las cosechadoras hacen en un día lo que antes llevaba un trabajo de varias semanas. También en aquellos años había rebajas pero hasta últimos de agosto o primeros de septiembre nunca empezaban. Sin embargo  había tiempo para casi todo y ahora parece no haberlo para casi nada. La gente andaba mucho más tranquila y relajada. No había vacaciones pero sí había domingos y días para descansar por más que el trabajo se amontonara. Ahora las fiestas de los pueblos se trasladan a fines de semana, en aquellos tiempos no había cambios cuando tocaba, tocaba.

¿Por qué teniendo ahora  conocimientos y adelantos espectaculares estamos más atrapados? ¿Será que vivimos precipitados en el tiempo y nos pasa como con lo de las rebajas que antes casi de que empiece el verano las tienen ya preparadas? Será que posiblemente manejamos muy bien nuestros inventos y nos olvidamos de ordenar y controlar nuestras vidas, o mejor dicho nos olvidamos de vivir.