¿2024? Casi mejor que no

La abuela le cantaba todas las noches una nana al niño para que se durmiera, pero un día fatal, el niño se incorporó en su cama y la dijo: —abuela sigue cantando fuera, quisiera dormir.

Sabemos que las olimpiadas se celebran cada cuatro años.  73 países participan en la dirección y gestión a través del Comité Olímpico Internacional  -COI- . La solicitud para sede de los juegos se hace se hace en primera instancia al SAN -Comité Olímpico Nacional-. De la misma nación no puede haber más que una candidatura. En 1992 tuvimos los juegos olímpicos de Barcelona, todo un éxito.  Apunto todo esto para decir que España hizo el Quijote presentando ya la candidatura de Madrid a los juegos de 2012, cuando los de Barcelona estaban tan cerca en el tiempo.  Volvió a hacerlo para 2016 y tampoco lo logró. Ahora parecía  que el 2020 sí que iba en serio y algunos como el director de El Mundo ya vendían la piel del oso antes de cazarlo, al hablar de 50 votos ya seguros. Son 103 miembros con derecho a voto, quitamos 5 porque los de  los países solicitantes –España, Turquía y Japón- no  votan, otro más porque el Presidente no suele votar  y nos quedan 97 o sea que con 49 nos hubiera valido.

Lo cierto es que Madrid y Estambul empataron en una primera votación a 26 votos y en el desempate Estambul ganó por 4. Ahora

Tampoco fue a la tercera.

viene echar las culpas a Maroto, y al que pasaba por allí. Seguro que ha habido en el COI  influencias y trapicheos, hasta Francia dicen que nos puso la zancadilla para aspirar ella mejor al 2024; pero es que con todo eso y más había que contar. Yo pienso que lo peor de todo es que por nuestro afán de pretender ser más listos que nadie, sin dejar transcurrir un mínimo tiempo razonable de Barcelona 92, presentando Madrid candidatura prematuramente en 2012, ahora ya son tres veces consecutivas intentándolo, por lo que ha acabado chamuscada sino quemada y una cuarta podría resultar patética.

Las nanas de la abuela al niño le quitaban el sueño y la mandaba marchar.  Parece que nuestras partituras para ser sede  olímpica ya empezaran  a irritar a los miembros del COI y los muy caraduras nos mandan con la música a otra parte.