Me contaba ayer Santos que en
Villafañe había un paisano que cuando iba
de camino para la finca a arar con el burro se colocaba el arado en sus hombros y a
continuación se subía al asno. Alguno le
preguntó que por qué no ponía el arado en los lomos del jumento, a lo que contestó: ya que el burro me lleva a mí a hombros yo por lo
menos llevo el arado así le pesará
menos. La pregunta que se me
ocurrió a continuación es quien sería más burro si el de cuatro patas o el de
dos que iba encima.
Los que venían a regenerar la
vida política, a cambiar las cosas, a acabar con la corrupción, el nepotismo,
los malos modos, en fin a hacerlo bien; resulta que no llevan ni tres meses y
están cubriéndose de gloria pero de la mala
por todas partes. La señora
alcaldesa de Madrid va y mete a su sobrino político Luis Cueto como Jefe de
Gabinete, A Luis Maestre, padre de la portavoz del ayuntamiento, la asalta
capillas Rita Maestre; lo coloca al frente de la nueva Subdirección de
Atención al Contribuyente del Ayuntamiento…
La otra edil del segundo ayuntamiento de España, Barcelona, la señora Colau mete a su marido para
asesorarla aunque dice que no lo va a pagar el ayuntamiento sino el partido, es
decir todos los españolitos. Podíamos
seguir con el Quichi y más y más, porque la lista a pesar de hacer poco más de
dos meses de tomar posesión los nuevos ediles, ya ocuparía demasiado espacio y
tiempo.
¡Pobres burros!¡Pagan tantas culpas que no tienen! |
Claro es que esta gente es tan
voluble, tan maleable que se adapta a todo. En una entrevista para Canal Sur,
la alcaldesa madrileña aseguraba que "alguien al que se le achaca algo que
pueda resultar delito debe dejar su cargo político…" Y ya ven
ahí tiene a la Maestre para la que la fiscalía pide un año de cárcel.
Esta mañana la oí (lo que me ha impulsado a escribir este post) que igual que no se puede beneficiar a nadie por ser familiar de un político,
tampoco por ello se le puede perjudicar.
Todo esto para justificar los dedazos sobre su sobrino, sobre el padre
de la portavoz etc. Está bien tener el mejor concepto de la familia, pero oiga eso
de juzgar que los ponen porque son los mejores es una falacia. Puede ser legal, pero apesta.
Yo no conocí al señor del burro
pero creo que cuando decía que llevando él el arado a cuestas, al asno le pesaba
menos, demostraba su cariño por el animal y lo decía convencido de ello. Estos,
cuando pretenden justificar lo que no es justo,
lo que demuestran es: o muy poco respeto por los ciudadanos porque ni ellos se lo creen, o que son más burros que aquel paisano de Villafañe.
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