Distintas varas de medir

Venia ayer en el Diario de León: piden  13 años de cárcel para un hombre de Villadangos   que contrató a un sicario para matar a su esposa.  Lo cierto es que la mujer sigue viva porque los hechos por diversos motivos no se consumaron, pero  al señor  se le va a caer el pelo.  Independientemente de que pudieran ser más o menos años todos pensamos que este señor merece un buen castigo y calificaríamos totalmente injusto que se pudiera ir de rositas.

Pues  los parlamentarios catalanes independentistas están intentando cometer un delito de sedición contra España, para ello no tienen ningún recato en poner todos los medios para llevarlo a cabo, incluso lo  anuncian a bombo y platillo.  
La Mesa del parlamento catalán ha aprobado que el próximo lunes 9 a las 10 de la mañana se debata en Pleno la propuesta independentista de Junts pel Sí y la CUP en la que apuntan los medios para la proclamación de la independencia de Cataluña y la desobediencia de las leyes del Estado Español.

Publicado en "Periodista digital"

En un comentario anterior en este blog hablaba de la pasividad del gobierno español  ante esos hechos. Bueno pues ahora llegamos a otra institución del Estado que parece que no quiere tampoco enterarse de lo que están haciendo. Los representantes de los partidos no independentistas catalanes:  Ciudadanos,  PSOE y PP pusieron un recurso ante el Constitucional para que no permitiese que se debatiera esa proposición,  el tribunal la admitió a trámite pero se reunieron para debatir el tema y… el elefante parió un ratón. Llegaron al acuerdo ayer (después de descansar unas horas  a mediodía para comer e incluso dormir la siesta) que no debían suspender  el  pleno porque hasta que no se celebrara como tal no se podía imputar delito.

No vamos a hablar ahora, ni de la profesionalidad de los miembros del  TC, que no tienen por qué ser jueces,  ni de que sus miembros son designados por los partidos políticos;  porque creo que para reconocer hechos como los que se debatían ayer no hace falta más que,  además de conocer un poco las leyes, otro poco de sentido común. El caso es parece que la mayoría de la clase política está de acuerdo en que lo que está sucediendo en Cataluña es un golpe de estado aunque sea sin armas, pero después los que tienen que actuar se pasan la pelota unos a otros.

Yo humildemente me pregunto porqué al señor de Villadangos  le piden 13 años por un delito que no llegó a cometer y  a gerifaltes independentistas que manifiestan públicamente sus deseos de cometer otro el próximo lunes,  dicen que por ahora no se les puede hacer nada. Una vez más la justicia parece que tiene más de una vara de medir.