miércoles, 21 de diciembre de 2016
Por favor, no dar mazazos
Cabría
pensar que lo que más transcendería de
esa estancia del Presidente sería precisamente ese discurso o alguno de los
actos desarrollados, pero parece que no, lo que más ha pregonado la prensa,
tanto escrita como digital, ha sido las habilidades del orador Mariano para
manejar el mazo de la Presidencia,
todo porque al parecer no le imprimió a la herramienta en cuestión la fuerza y
el toque oportuno.
Casi
todos los medios hablan de la falta de tino para desarrollar esa función "básica" pero algunos, como por ejemplo el libelo-panfleto "EL PLURAL",
autodenominado periódico digital progresista, de Enriq Sopena, que expone la
cuestión de esta forma: "momentos ridículos en la sede de Naciones
Unidas. Los momentos hilarantes de don Rajoy al frente de Naciones
Unidas no se quedaron ahí, porque el presidente del Gobierno tenía a su
disposición un emblemático martillo de madera como los que usan los jueces de
las películas americanas. Con él, Rajoy demostró un ímpetu digno de un
superhéroe y el primer mazazo a punto estuvo de tumbar la mesa"
Así
que según este libelo, Rajoy hizo el ridículo pero no por sus actos o palabras,
sino por dar unos mazazos más fuertes de lo normal. De todas formas
independientemente de criticar los mazazos podía a renglón seguido analizar el
discurso y demás pero eso parece que no le interesaba. La pregunta es: qué
información y qué consecuencias puede sacar quien lea un periódico como este y
no sepa de qué va.
Lo he escrito en alguna otra ocasión, es patético los medios de información que tenemos, todos escorados a una u otra parte aunque unos más que otros. Ni siquiera los medios públicos como las televisiones autonómicas o la misma TVE se comportan como independientes sino que siempre están apoyando al gobierno de turno. Triste, pero es lo que hay, pero eso sí todos pontificando que son los mejores y la única verdad es la suya. ¡Qué lastima!
Transportes del Río -Isaac y Alvaro- Transportes Gelo.
Lo he escrito en alguna otra ocasión, es patético los medios de información que tenemos, todos escorados a una u otra parte aunque unos más que otros. Ni siquiera los medios públicos como las televisiones autonómicas o la misma TVE se comportan como independientes sino que siempre están apoyando al gobierno de turno. Triste, pero es lo que hay, pero eso sí todos pontificando que son los mejores y la única verdad es la suya. ¡Qué lastima!
Begoña: Mercería y lencería. Atención y precio a su servicio.
Transportes del Río -Isaac y Alvaro- Transportes Gelo.
viernes, 16 de diciembre de 2016
A ver si aprendemos
En nuestro pequeño entorno parece respirarse en
todas partes ya la Navidad, todo son adornos, nacimientos, felicitaciones y
buenos deseos; pero la vida sigue también en estas fechas y también siguen los
problemas, las enfermedades, las desgracias, las guerras. Problemas que muchas
veces parecen inevitables y otras da la impresión que les vamos buscando. Enfermedades y desgracias que la condición
humana lleva a sus espaldas. Guerras que siempre hay quien pretende justificar
pero que en ningún caso pueden tener justificación cuando la mayoría de
la gente que en ellas muere son inocentes.
Tragedia, desolación y caos en Alepo. Imagen diario "El Mundo" |
Puede que en estos casos lo más terrible, no sean los bombarderos tirando bombas de racimo que caen sobre la
población inocente sino el odio y la
falta de respeto capaz de suscitar sentimientos que promuevan y justifiquen tales actos. Los que en otras ocasiones parecían estar tanto en
contra de las guerras parece que ahora se hubieran quedado mudos. Fanáticos
siempre aparecen en todas las guerras y en todas las partes. Nunca se puede
justificar el asesinato masivo de civiles, de niños de gente que estaba o pasaba por allí.
Las naciones poderosas
que no llegan a un acuerdo global en
algo tan necesario como acabar con las guerras y una vez más saltan las alarmas
y la pregunta de que para qué sirve la ONU. Más de 400.000 muertos en esta guerra fratricida, a cientos un día y otro también y sin atisbos
de solución como no sea porque ya no
quede población ni ciudad por arrasar.
Mientras aquí en
España cuando apenas hace 80 años pasamos por algo parecido, hubo unos tiempos
en la transición en que el pueblo se puso de acuerdo para pasar página y lo
habíamos superado y nos habíamos olvidado de juzgar a nadie por aquel pasado,
pero, oh sorpresa, ahora aparecen necios vociferantes que no vivieron nada
de aquello y que quieren juzgarlo y rememorarlo otra vez a su manera. Si es que
no aprenderemos. Claro la culpa mayor la tienen los que se dejan embaucar por
sus mentiras y cantos de sirena. Vivimos en un país en democracia y en paz,
ahora incluso con un gran crecimiento, también con dificultadas y cosas
negativas. No busquemos problemas donde no los debería haber. Educación y
respeto.
Pues eso que estamos
ya en épocas navideñas, que son fechas propicias para reforzar los sentimientos
de paz y de amor. Que deberíamos pensar que más allá de nuestra familia,
nuestro pueblo, nuestra nación; también hay personas que pueden necesitar de
nuestra ayuda, cariño y compresión, como en estos días la población de Alepo.
Begoña: Mercería y lencería. Atención y precio a su servicio.
Transportes del Río -Isaac y Alvaro- Transportes Gelo.
miércoles, 7 de diciembre de 2016
El abuelo murió en casa por Navidad
El abuelo tenía más de 90 años y estaba ingresado. En los últimos años con frecuencia pasaba unos días en aquel lugar para hacer algún "chapuz" y
así poder seguir tirando por su vida. Esta vez probablemente sería la última,
ya se lo había dicho el médico a su hija Lucia: su padre está en el tramo
final, su corazón ya no da más, es como una
vela que se acaba y de la que apenas sale un hilito de luz. Se
acercaban las navidades, probablemente el abuelo no saldría de esas fechas, Lucia
no se lo pensó dos veces: quedaba tan poco tiempo que no merecía la
pena "negociar" unos días más de supervivencia a costa de seguir ingresado, lo mejor era llevársele
para casa en un tiempo tan especial.
Lo había decidido, llevaría a su padre con su familia. Aunque de la salud ya había poco que hablar con el doctor, aquel día le esperó y le
expuso sus deseos de llevarse al enfermo. El médico, un poco sorprendido, no
era esa petición lo habitual en estos casos, mostró al principio su oposición pero pronto
comprendió que la mujer tenía razón: —pues si usted así lo quiere, le prepararé
los papeles para que se lo pueda llevar, los tratamientos de supervivencia que aquí le
damos aunque a su casa algunos no se
puedan llevar quien sabe si la entrega y el cariño los puedan compensar. Con una
ambulancia por medio y unos minutos, no más, ya que el pueblo estaba cerca, Manuel pasó de la cama del hospital a la suya de siempre.
Los chicos ya eran grandes, solo uno quedaba en casa, que además era el encargado de ir al monte
todos los años.
—Mamá, Navidad se acerca mañana te traeré el árbol.
—Lo que tú hagas hijo, pero yo casi paso. Ya ves el Belén que tenemos en casa con el abuelo.
—Mamá, Navidad se acerca mañana te traeré el árbol.
—Lo que tú hagas hijo, pero yo casi paso. Ya ves el Belén que tenemos en casa con el abuelo.
—Mamá pues yo creo que ese un
motivo más para ponerle, será el último que él pueda ver.
—Vale hijo como tú quieras.
—Vale hijo como tú quieras.
Al día siguiente, como todos los años, Lucia con el hijo y el marido que, por lo menos, les daba las faltas; colocaron
la rama de pino lucida y engalanada a la entrada de la casa.
El
abuelo requería muchas horas para estar bien atendido que Lucía estiraba con creces para estar a su lado sentada. Apenas
balbuceaba, pero con paciencia y con amor ella le entendía casi todo. La estaba diciendo algo pero no lo acababa de
comprender. Los destellos navideños se colaban a la habitación del anciano.
—Árbol, luces. —parecía que murmuraba.
—Sí
papá, sí, ya pusimos el árbol.
—Coño, coño, no ver.
—Sí papa, está ahí a la entrada.
—Yo no ver árbol, no veo árbol. —Como muy desasosegado.
—Coño, coño, no ver.
—Sí papa, está ahí a la entrada.
—Yo no ver árbol, no veo árbol. —Como muy desasosegado.
La
familia comprendió que el abuelo sufría porque no podía ver todo aquel "envoltorio", decidieron que la única solución era trasladarlo a su habitación y así lo
hicieron. La mirada antes perdida del
abuelo ahora se centraba minutos, horas, en las luces y todo alrededor. A veces,
hasta incluso, parecía que sonreía. El
árbol ahora era su mayor motivo de los
mínimos comentarios. —Hija luces apagar porque fundir. Y Lucia apagaba un poco
las luces para que se le fuera al abuelo el temor de que se fundieran. Ahora Manuel
se atrevía levemente a señalar con la mano, una luz se había fundido, había que
cambiarla. Parecía como si los graves problemas hubieran desaparecido y todo
girara en torno al árbol.
Sí,
había sido un gran acierto ponerlo en la habitación del abuelo. Había menos miradas perdidas, menos cabezas
cabizbajas, había incluso alguna vez algún atisbo de sonrisa a cuenta de la rama. Puede que hasta
fuera un gran motivo para seguir viviendo. Las Navidades a su fin tocaban, el
abuelo allí seguía a pesar de que el médico había dicho que de ellas no
saldría.
Pero
los reyes les jugarían una mala pasada. El abuelo esa mañana ya no tenía mirada, sus ojos permanecían
cerrados, por más que su hija le hablara. Creo que ha llegado su hora, comentó Lucía
a la familia que pronto se arremolinó en torno a la cama. El abuelo comenzó a
respirar con mucha dificultad, jadeaba. ¡Se nos va! ¡Se nos va! De repente como
en un espasmo abrió los ojos y como hipnotizado, pareció dirigir al árbol su
postrera mirada. El abuelo había muerto. El hijo se abrazó a su madre: ¡Mamá, mejor no pudo morir!
miércoles, 30 de noviembre de 2016
Navidad en el solsticio de invierno
—Mira papa hay un concurso
literario de Navidad en el instituto en
el que podéis participar también los padres. —Me dice el guaje.
—Vale, pues nada, si es por participar se participa. —Contesto.
—Aquí vienen las bases.
—Me acerca un folio.
Lo echo una ojeada. Tema: Solsticio de invierno y/o el invierno en tierras leonesas.
—Yo pensé que por ser un
concurso de Navidad sería para hablar de la misma. No me gusta este trapicheo
de temas/títulos, me temo que no voy a participar.
—Eso son disculpas. —Asegura.
—Me lo tendré que pensar.
Y pensando recuerdo que dice
la alcaldesa Carmena que este año celebrará el Solsticio de Invierno con un
gran desfile de luz y fuegos. La Colau
de Barcelona parece que también está por hacer algo parecido.
Debe ser que lo del
solsticio no me acaba de cuadrar. Cada uno puede celebrar lo que quiera y
cuando quiera, lo que no veo correcto es que algunos dirigentes públicos
pretendan cambiar una tradición tan entrañable como la Navidad por la puerta de
atrás.
Se cuenta que los pueblos celtas y romanos hacían ya grandes fastos en los dos solsticios de invierno y
verano, también en los equinoccios de primavera y otoño. El 21 de diciembre celebraban el Yule, la noche
más larga del año, con grandes hogueras, cantando y bailando a su alrededor durante
toda la noche. Yule según el viejo inglés significa "rueda", parece que
relacionado con la esfera solar. La
rueda va girando y los días van
creciendo, naciendo con ello un nuevo año a partir del día más corto con el aumento
paulatino de las horas de sol.
Parece que la Navidad como
tal empezó a celebrarse en la edad media
allá por el año 320, fueron los Papas de entonces los que la quisieron conmemorar para matar, dos pájaros de un tiro: instaurar el rito
religioso y pasar por encima de lo que
hasta entonces venía haciendo como fiesta pagana. En el calendario
juliano, introducido por Julio Cesar, el
solsticio de invierno caía el 25 de diciembre por esto los Papas escogieran ese
día para celebrar el nacimiento de Cristo. La celebración de la Navidad además
de las fechas, "heredó" muchos de los
actos que anteriormente se hacían: luces,
árboles, cánticos, color…
La tradición debe mandar |
A partir de entonces la
Navidad ha calado de forma especial en la cultura europea, más si
cabe en España y es raro el hogar, creyente o no, donde por esas fechas no se asiente un
nacimiento o un árbol de Navidad. No me parece mal que quien le apetezca celebre
el Solsticio de forma individual, lo que no entiendo es por qué pretenden
cambiar una tradición tan milenaria y tan especial solo porque a algunas o algunos
ediluchos parece que todo lo que tenga
connotaciones religiosas no les va nada bien. De extrañar nada, por supuesto. Ahí tenemos también las celebraciones de lo
que se atreven a llamar bautismos y
comuniones civiles, como si tuvieran algo que ver con las celebraciones
religiosas del mismo nombre. ¡Podían, al menos, ser
más originales, digo yo!
Así que creo que estaría
encantado de poder participar en el
concurso si se tratara de hablar de la
Navidad en León y no del Solsticio, aunque puede
que lo haga, sobre todo por mi hijo que sé que le encantaría, pero… me lo tendré que pensar.
sábado, 26 de noviembre de 2016
Entre todos la mataron y sola se murió
Era un seminario para parejas en una universidad USA, uno de los conferenciantes le pregunto a una de las mujeres: ¿Su marido le hace feliz? El marido levantó la cabeza como un pavo real porque pensaba que su esposa diría que sí, ya que nunca se había quejado de nada en el matrimonio; pero resulta que la mujer respondió a la pregunta con un clamoroso "No". El hombre estaba acobardado y desconcertado pero ella continuó: "¡mi marido nunca me ha hecho feliz y no me hace feliz! Yo soy feliz. El hecho de que yo sea feliz no depende de él, sino de mí, yo soy la única persona de la depende mi felicidad y la busco en cada situación y en cada momento...
No creo que esta señora si su marido fuera un cantamañanas y no digamos ya un maltratador pudiera decir lo mismo pero por supuesto que todo lo que nos pasa en primer término y en gran parte depende de nosotros. Con frecuencia oímos: es que la Constitución dice que tenemos derecho a una vivienda digna, es que este gobierno no soluciona el problema del paro, es que hay malas carreteras, es que... Como uno mismo no se proponga tener vivienda y haga lo necesario, mal que le venga de tóntolis bóbilis, por mucho que lo diga la Carta Magna, como uno no busque trabajo, mal que se lo vengan a ofrecer a casa, cuando uno tiene un accidente el echo de que carretera estuviera mal no le justificara nada.
Estos días hemos vivido el caso de la muerte de Rita Barberá a consecuencia de un infarto tal vez por el acoso al que fue sometida. Unos dicen que la culpa es de los suyos, su partido que la apartaron y abandonaron, otros dicen que son los medios especialmente la Sexta y la Cuatro... Todos pretenden echar balones fuera, cuando la verdad es que todos deberían decir aquello de "por mi gran culpa": esas televisiones basura que con tal de audiencia y publicidad sacan mierda de donde sea, aunque siempre del mismo lado, esos políticos, incluidos los de su partido que ven la paja en los demás y no la viga en ellos. Por supuesto echaremos de comer aparte a los miserables de Podemos que la sentenciaron de muy corrupta antes que cualquier juez y tuvieron la falta de humanidad para marcharse y no guardar un minuto de silencio cuando los demás diputados lo hacían.
Culpas y disculpas para escurrir el bulto y no afrontar cada cual su responsabilidad, para que sean los demás los que saquen las castañas del fuego. Lo triste es que ya no nos sorprende a nadie porque estamos en lo de siempre. Puede que en ambientes tan hostiles como el que muchas veces nos rodea pueda uno como la señora, incluso ser moderadamente feliz, pero lo que está claro es que el país, la nación con esos "inquilinos" dirigiendo el cotarro, no puede llegar muy lejos.
viernes, 18 de noviembre de 2016
Si es que hay gente para todo
Pues nada aquí estoy dándole a la
tecla pero sin saber que poner ni de qué hablar. Podría hablar de lo de la apertura de la legislatura parlamentaria que
inauguró ayer el Rey y en la que como siempre
los zampabollos de turno intentaron dar la nota con sus gestos
retrógrados. Podría comentar los intríngulis del gobierno, de la oposición, de
los partidos, pero para esto aprovecho los días con más humor porque me
resultan enormemente pesados, reiterativos en sus soflamas y, en definitiva;
aburridos. Un hombre en la Virgen del Camino mata a su mujer y el luego se ahorca: poco de
esto se puede comentar como no sea hasta dónde puede llegar la condición humana
cuando pierde el norte.
Pone uno el telediario y parece tele sucesos:
estafas, secuestros, timos, peleas, asesinatos... como si las noticias negativas estuvieran muy
por encima de las positivas y eso no es cierto ni puede ser porque en el mundo
hay mucha más gente buena que mala. Hubo un tiempo que, al contrario que ahora,
todo lo que salía era bueno: todos los días se inauguraban pantanos, colegios, se
visitaban fábricas, se construían carreteras, como contrapartida nos daban los
muertos de aquel día en Vietnam pero bueno eso quedaba muy lejos. Pues ni tanto
ni tan calvo, ni lo de ayer ni lo de hoy.
Algo en nuestra educación y
cultura debe estar fallando porque ahora lo que vende es lo tempestuoso, lo no
correcto, lo malo. Hay que llamar la
atención como sea, hay que buscar la audiencia a cualquier precio. Hoy montas tú el circo y mañana yo. Solo
así se entiende que los programas de más share tengan como hilo conductor, la
depravación y el mal gusto hasta límites extremos. Más que censurar que una
persona pueda salir en las televisiones u otros medios, con más o menos ropa, lo que habría que borrar son esas
conversaciones, esas escenas tan chabacanas y grotescas, que lo único que
tratan de poner a la vista es lo más ruin de las personas.
Circo zafio. Imagen: Vanitis, El Confidencial. com |
Lo cierto es que si esos
programas funcionan es porque hay gente que los ve. Tenemos tropecientos
canales: malos, buenos, de esto y de lo otro y resulta que lo que más se pone,
muchas veces es lo más burdo y lo más zafio. ¿Y quién tiene la "culpa" de que
ocurra esto? Sin duda en primer lugar el que los ve, pero creo que alguien más,
bastantes más. Por ejemplo los gobiernos que han permitido que los dos grupos
mediáticos más importantes que hay de
televisión con unos cuantos
canales cada uno; sean de propiedad mayoritaria extranjera, italiana:
ATRESMEDIA Y MEDIASET, que acaparan el 90% de la publicidad de televisión.
También otro gallo cantaría si las empresas anunciantes a la hora de poner sus spots
miraran además de la cuota de pantalla; la educación y el buen gusto. Ya me dirán "capos" como Berlusconi, propietario de MEDIASET, qué interés puede tener en que además de
ganar dinero, su TV sea buena, más si
tenemos en cuenta que su vida está plagada de conductas reprobables.
Tenemos que aferrarnos al lado
positivo de las cosas. Ayer en el Congreso, fueron muchos más los que se comportaron que
los zampabollos, hay sucesos negativos pero hay muchos más que dan su vida día
a día para que otras personas salgan adelante. Lo han dicho grandes personas,
que por aquí he nombrado alguna vez: lo negativo, lo malo ha existido siempre y existirá
lo peor sería no plantarle cara.
martes, 15 de noviembre de 2016
Ser padre o pianista
Ya en el siglo V antes de Cristo
el gran filósofo Heráclito decía que la vida es cambio, es movimiento. Todo y todos vamos caminando y
cambiando cada momento, cada día. Lo ideal sería que el movimiento, el cambio
fuera siempre a mejor, pero también puede ser y lo es, muchas veces, en muchos aspectos; a peor.
Claro que, eso de mejor o peor depende de cómo se mire y de quien lo
juzgue.
Estar en la calle lo más posible. Imagen de dis ancor blogspot.com |
Hubo un tiempo en que no
existían todos los juegos y
adelantos cibernéticos que hoy mandan en nuestra vida cotidiana. Entonces los chavales soñábamos con estar en la
calle el mayor tiempo posible, inventábamos
juegos si no les había y ampliábamos espacios si era necesario, la felicidad a nuestro alcance siempre se
encontraba en la calle. Hoy las cosas han cambiado, en casa o donde cuadre, lo
que buscan los chavales es la consola,
el móvil, el PC … Internet. Ya no es el
afán de correr tras un balón o cualquier otro artilugio, sino navegar por la red. Antes el castigo era no poder salir de casa,
hoy es no tener acceso a ese mundo virtual.
En ese mundo un tanto embrujado
se pueden descubrir muchas cosas interesantes y buenas pero también se puede
uno topar con casos imprevistos. Esta misma mañana oía por la tele que el 80%
de lo que se comenta por las redes sociales del espacio, es mentira. Visto lo cual no sé por qué hay
gente que se extraña de que pasen los casos que pasan. El caso de los chavales y adolescentes donde
las aspiraciones, inquietudes y "ambiciones" están todavía por definir,
absorber toda esa información falsa es todavía mucho más fácil y probable.
Sin duda, los padres tenemos que
estar al loro. Tener hijos, por mucho que algunos lo crean, no le convierte a uno en padre, igual que
tener un piano no le convierte a uno en pianista. Hay
que echar horas al piano y a los hijos para lograrlo. Hay que ir doblando, como las cachas que se hacen
de las ramas verdes, aprovechando esa ductilidad que tienen tanto los
bastones como a esas edades los guajes, para llevarles por el buen camino. No estoy
hablando de imposiciones, ni de vetar por vetar, más bien de convencer y de
ayudar.
Debe ser que uno ya está
cuadriculado por lo que ha vivido pero me da pena ver chicos que en esos
días luminosos y esplendidos prefieren
pasar las horas al lado de un ordenador o una consola a andar sueltos por la calle jugando, viviendo la vida real con toda la naturaleza
que la rodea.
viernes, 11 de noviembre de 2016
Lo cierto es que ganó Trump
Había
una vez un tal Zapatero que en un desfile de las fuerzas armadas al paso de la
bandera de Estados Unidos, cuando todos estaban de pie él se quedó sentado. Al
poco tiempo cuando fue Presidente, por cierto bastante nefasto para España, no sabía el pobre que hacer para
que fuera recibido por el mandatario del país, al que había faltado con su
comportamiento insensato y caprichoso. Como era de esperar pagó con creces su osadía, pero lo peor es que también
pagamos sus extemporaneidades todos los
españoles.
Donald Trump, Hilary Clinton TVE |
Servidor
hubiera deseado que hubiera ganado Hillary Clinton, hasta hubiera dado
algo (no mucho) porque esto ocurriera, pero
resulta que ganó Donald Trump . Resulta que salió elegido en unas elecciones
democráticas a las que no se las pueden poner objeciones. Es cierto que en
votos le superó su adversaria por los intríngulis de la repartición del voto de las poblaciones para la elección de compromisarios, pero esto no merma legitimidad y democracia a su victoria que está
dentro de las normas que ellos mismos se han dado.
También
es verdad que el señor Trump ha dado, sobre todo en su campaña, muestras de ser
un sujeto fácilmente mejorable: el muro que quería poner a Méjico, cerrar fronteras, retórica de misógino que infravalora a las mujeres, faltoso con
muchos, incluso con algún discapacitado, insulto a personas, entre ellas a la
señor Clinton... en fin múltiples salidas de pata de banco; pero a pesar de todo
ello, lo cierto es que ganó las elecciones.
Se
habla de que una persona con los deslices,
temperamento y estado mental como Trump no
puede tener en sus manos la posibilidad apretar el botón nuclear que podría
matar a millones de personas. No es tan fácil como algunos lo pretenden pintar.
El maletín nuclear, del que una copia va con el Presidente a todas partes,
incluye dentro unos códigos a los que tiene acceso este, pero no se trata así sin más de tener a su alcance dicha
posibilidad, antes tienen que cumplirse una sería de normas y condiciones para
adoptar una posición que emana del Pentágono y las altas autoridades. A fin de
cuentas el Presidente lo que hace, más
bien, es refrendar esas posiciones.
Apenas lleva unas horas el nuevo mandatario electo y ya todos advierten que ha cambiado su actitud, que es mucho más amable y conciliador. Claro, no es lo mismo estar en el fragor de la campaña y hacer cualquier cosa por arañar un voto, que saber que pronto tendrá que ponerse a gobernar. Pero da igual hay unos cuantos listillos por ahí: periodistas, políticos etc., que siguen con sus insultos y descalificaciones al nuevo inquilino de la Casa Blanca y lo que es peor, también hay quien hace lo mismo con los millones de votantes de aquel. Es que son tan tolerantes que para ellos, solo las elecciones son justas cuando sale lo que ellos quieren. A ver si les va a pasar lo que a Zapatero que después algún día tienen que arrepentirse de ser tan "demócratas".
Apenas lleva unas horas el nuevo mandatario electo y ya todos advierten que ha cambiado su actitud, que es mucho más amable y conciliador. Claro, no es lo mismo estar en el fragor de la campaña y hacer cualquier cosa por arañar un voto, que saber que pronto tendrá que ponerse a gobernar. Pero da igual hay unos cuantos listillos por ahí: periodistas, políticos etc., que siguen con sus insultos y descalificaciones al nuevo inquilino de la Casa Blanca y lo que es peor, también hay quien hace lo mismo con los millones de votantes de aquel. Es que son tan tolerantes que para ellos, solo las elecciones son justas cuando sale lo que ellos quieren. A ver si les va a pasar lo que a Zapatero que después algún día tienen que arrepentirse de ser tan "demócratas".
miércoles, 9 de noviembre de 2016
El arte de la palabra
Advierto
un tumulto en el rastro de Papalaguinda y me acerco a ver qué pasa. Una
vendedora y un hombre discuten acaloradamente. El señor, con pinta de
pueblerino, asegura que una de las herramientas
usadas que esta tiene a la venta es suya. Ella se sube por las paredes, jurando
por sus hijos que miente. Este sigue
apostando por su verdad y que conoce muy bien la herramienta con la que ha
trabajado así como las marcas que tiene. La marchanta habla de que se está
mancillando su honor, dice que se está
jugando con el pan de sus hijos y amenaza, pero el hombre no cede. Ahora se acercan unas cuantas personas al parecer del clan de la sujeta para seguir
amedrentando e intimidando al presunto dueño. La cosa se pone que echa chispas, el señorín sigue en sus trece pero otro que le acompaña le anima a que
se vayan y se alejan echando pestes poco
a poco.
Todos
nos vamos alejando del corrillo y formando otros más pequeños en los que se
murmura que el hombre seguro que tiene razón, pero instantes antes nadie,
tampoco yo, hicimos nada para que se
sintiera apoyado. ¿Obramos así por cobardía, pasotismo o conveniencia en aquel momento de no echar más
leña al fuego? Probablemente de todo un poco. También es cierto, en nuestro descargo, que al 100% no estábamos los mirones seguros
de nada. Pero pienso que hubiera estado muy bien que al menos viera que no estaba
tan solo aquel hombre.
En
el partido de la tele pitan un penalti, como siempre entre los que estamos en
el bar hay quien está en contra de la decisión arbitral y otros que intentan
aplaudirla y justificarla. Al final se quedan dos en la refriega, ya empiezan
las subidas de tonos y las descalificaciones, aunque sean de rango menor, uno de los contrincantes abandona pero
el otro no cesa como si quisiera convencernos a todos los del establecimiento
que era él quien tenía razón. En este caso creo que casi todos nos dimos cuenta
de que independientemente de la verdad que en el caso pudiera tener lo que
quedaba claro es que era un bocazas.
Sí,
el arte de la palabra también tiene sus complicaciones. Con educación y respeto
nunca debería estar de más, no debería ser la cobardía la que silenciara
nuestra voz, pero como en estos casos apuntados, hay veces que no es tan fácil,
ocasiones en que hasta se puede estar mejor callado. Lo que está claro es que
por levantar más la voz, no se tiene más
razón, tampoco es cuestión de aguantar plomazos por intentar ser educado.
El que calla no siempre otorga, también
hay casos en que no tiene ganas de discutir con idiotas.
viernes, 4 de noviembre de 2016
Hoy hablaremos del gobierno
Hace años, en los últimos
coletazos del Franquismo, el dúo humorístico
Tip y Coll tenían un espacio en TVE que salía los domingos por la tarde y
siempre la frase que cerraba cada uno de sus programas era la misma: "el
próximo día hablaremos del gobierno", pero
después nunca lo hacían. Ayer fue presentado por Rajoy el nuevo
gabinete, hoy han tomado posesión de sus cargos y hay opiniones para todos los
gustos.
Los que estaban y continúan ya se les conoce, emulando
un poco al famoso dúo, me voy a fijar un poco en los nuevos:
Alvaro Nadal es el nuevo ministro de Energía
Turismo y Agenda Digital. Ya estaba en
la Oficina Económica del Presidente. Es el clásico Pitagorín y además empollón
que siempre destacó en todo, siendo número 1 en todos los exámenes y
oposiciones que se presentaba a no ser en alguna que le gano su hermano gemelo
Alberto, que por lo visto es tan competente como él.
Iñigo de la Serna ministro de
Fomento. Era el actual alcalde de Santander y le ha dado muchos capones al
demagogo Presidente de Cantabria, Revilla. Un ingeniero de caminos, gran
parlamentario y que ya se apunta como
nuevo delfín para sustituir a Rajoy.
Juan Ignacio Zoido ministro del
Interior, Juez de profesión, anterior alcalde de Sevilla, y que conoce bien los
entresijos del ministerio además de las circunstancias especiales de toda la
autonomía andaluza.
María Dolores de Cospedal nueva ministra de
Defensa. Un gran ministerio pero a la vez muy fácil de llevar teniendo al lado
un buen Jefe del Estado Mayor de la Defensa, por eso, al menos de momento podrá
simultanear el cargo con el que ya tenía de Secretaria General del Partido
Popular.
Alfonso Dastis hasta ahora embajador
representante permanente de España en la Unión Europea, pasa a ser ministro de
Exteriores. Está bien que un diplomático de carrera acceda a este puesto y no
el amiguete de turno como venía sucediendo, que para algo las oposiciones a diplomático
las cuentan las más duras, sus compañeros de profesión seguro estarán contentos.
Por último en los nuevos la cuota
catalana la tenemos en Dolors Montserrat que es la nueva ministra de Sanidad,
Asuntos Sociales e Igualdad, buena parlamentaria pero aún por demostrar que
pueda ser buena ministra de Sanidad.
Pues estos que llegan junto con
los que siguen: Montoro, de Guindos,
Saez de Santamaría, Bañez, García Tejerina, Rafael Catalá, e Iñigo
Méndez de Vigo que además ejercerá de portavoz, conforman el nuevo equipo. Por
supuesto que, antes incluso de hacer o decir nada, la oposición ya les ha
colgado el cartel de continuistas e inadecuados para las actuales
circunstancias de necesidad de cambio y diálogo. Démosles al menos los tres
meses, 100 días de margen que se suelen dar y entonces hablaremos bien o mal del gobierno. En las actuales circunstancias con solo 135
diputados les va a ser muy difícil gobernar y lo será por más que en lo
esencial, que debería ser que haya paz, justicia, crear riqueza y repartirla favoreciendo a los
que más lo necesitan, tendrían que estar
todos bastante de acuerdo; pero eso ya es harina de otro costal.
miércoles, 2 de noviembre de 2016
Concienzudo estudio
Los tiempos pasan y cada tiempo y
época trae su forma de vivir, sus modas: en el vestir, en la música, en los más
diversos aspectos que sin ser fundamentales rodean nuestra existencia. Modas
que afectan superficialmente la vida de las personas y que no deberían interferir
en lo más esencial. Como si de una moda más se tratara a veces nos hablan de
cambiar comportamientos de primer orden, modelos que antes nos vendieron como
ejemplares y que ahora dicen negativos,
basados siempre, según "ellos", en un concienzudo estudio.
Hace años se decía que el aceite
de girasol era menos perjudicial que el aceite de oliva, hoy el aceite de oliva,
esencial en la dieta mediterránea, es
poco menos que la panacea de todos los bienes. También por aquellos años se anunciaba que el pescado azul era poco menos
que el demonio que traía todos los males y ahora se pondera a la sardina o el chicharro que dicen
que tienen muchos ácidos grasos omega 3 muy buenos para controlar el colesterol.
Acabo de leer que según la
doctora Sara Kayat no se deben lavar los dientes inmediatamente después de las
comidas y bebidas, especialmente si estas son ácidas. Después de comer el
PH de la boca disminuye y tarda en volver a la normalidad si lo hacemos entonces asegura,
frotaremos el ácido y dejaremos los dientes y encías más vulnerables, por ello dice que
se debe esperar al menos una hora desde el fin de la comida para cepillarse los
dientes. Además Cayat recomienda no
enjuagarse después del cepillado ya deben quedar residuos de pasta que seguirán protegiendo la boca. Toda
la vida con la matraca de lavarse los dientes después de comer para esto.
Al menos nos queda la siesta |
Pensábamos que era bueno el fin
de semana aprovechar para reponer fuerzas estando más en la cama y llega la
neuróloga Anish Bahra y asegura que no hay que dejar de madrugar los días
libres. Nos dice que cambiar el patrón de sueño tiene un efecto potencialmente
negativo sobre ciertas hormonas del hipotálamo, lo que puede desencadenar
dolores de cabeza. Asegura que madrugar es positivo para nuestro organismo,
mejora el sistema inmune, hace que el sueño sea más reparador, Bueno por lo
menos aunque recomienda levantarse pronto aún con sueño, luego habla de echarse una siesta
durante el día.
Análisis y estudios, como creo
que he dicho en alguna ocasión, los hay para todos los gustos. No vamos a
desconfiar de su fiabilidad, pero lo que sí es cierto es que cada persona es un
mundo, uno mejor que nadie puede saber, a poco que se lo proponga, lo que
realmente le viene bien o mal en cada caso. A mí, desde luego, por mucho que la neuróloga
insista, estoy seguro que quedarme en la cama, cuando no tengo que trabajar, un tiempo más, me viene fenomenal.
viernes, 28 de octubre de 2016
Siempre Carmen
La señora de la guadaña deambula por donde le viene en gana y escoge a quien le apetece. Inútil es intentar disuadirla. Pero nos ha podido llevar tu físico aunque debe estar que trina porque nunca logrará arrebatarnos tu recuerdo, ni tu vida. Y es que Carmen, además de estar en un lugar que quiero imaginar feliz y en paz: vives en mí y en todos los que tanto te queríamos y te seguimos queriendo.
Tres meses, desde aquel uno de enero, en mis recuerdos, en la imaginación... en mi vida, como nada ni nadie. Y es que todo me recuerda a ti.
Cuando veo la nieve pura y blanca, me recuerda la blancura de tu alma. Cuando el otro día el aire azotaba mi ventana en el, tú me susurrabas: hermano todo pasa. Cuando los pajarillos cantan, me recuerdan con su canto los sonidos saltarines que salían de tu garganta. Todo lo bueno que queda todo viene en tu recuerdo y tu presencia refrendado.
La multitud de flores que anuncian la primavera, también me anuncian tu vida, tu sonrisa, tu silueta. El río embravecido que baja por la ladera, me recuerda tu coraje, tu valor, tu nadar contra corriente, contra injusticias y afrentas a riesgo de lo que fuera. Cuando en la noche avanzada miro hacia las estrellas, rebusco las más brillantes, porque has de ser tú una de ellas.
Te imagino sonriendo con esa sonrisa fresca, hablando y escuchando mucho, con alegría y viveza. Siempre presta, siempre atenta, arrancando la tristeza, plantando ilusiones nuevas. Cuando una paloma veo por el cielo planeando, la imagino mensajera anunciando tu presencia. Cuando al nacer el día miro hacía el horizonte, en las luces de la aurora, apareces con tu nombre.
Aquel cura viejo y terco, no por ello menos bueno, que había en nuestro Palazuelo, repetía con firmeza: el Ángel de la Guarda es vuestra guía y vuestra fuerza. Mi querido D. Ramón, puedes decirle a tu Dios que destine a otro mi Ángel, que ahora tengo otro mejor, que tengo a mi hermana Carmen.
Cuando beso el panteón, donde tu naturaleza humana, marchita sin compasión; pienso en la gran injusticia que está cometiendo Dios y confío que algún día, sepa reparar su error.
SIEMPRE CARMEN. Siempre toda. Siempre mientras viva, siempre. Todo el día, a todas horas.
Abril 2001
lunes, 24 de octubre de 2016
Qué pasa con las pensiones
En 1883 se
promulga la Ley de accidentes de trabajo, en 1908 se crea el Instituto Nacional de
Previsión que gestiona una serie sistemas de seguros que van surgiendo: Retiro Obrero 1919, Seguro Obligatorio de Maternidad 1923, Seguro de Enfermedad 1943, Seguro
Obligatorio de Vejez e invalidez (antiguo SOVI) 1947, en 1961 nace la primera Ley Nacional contra el Desempleo. El paso de esos seguros a uno total se logra con la que
se puede llamar la piedra angular del edificio de protección social: la Ley de Bases de la Seguridad Social de
1963, modificada y ampliada en 1972 que fue la que rigió hasta la llegada de la democracia en 1977 con
la publicación de un libro blanco y la creación del ministerio de Sanidad y Seguridad
Social.
Hay dos forma de abordar la financiación de la Seguridad Social: capitalización y reparto. En el primero cada trabajador va aportando sus fondos
a una hucha que el estado le va guardando y que le irá reintegrando cuando
llegue su retiro u otra contingencia. En el sistema de reparto los trabajadores
en cada momento cotizan para cubrir los
gastos y también las pensiones de los mayores, los que vengan detrás
contribuirán para pagárselas a estos. Es por lo tanto un modo de solidaridad
intergeneracional.
Así pues la
implantación de una protección a nivel
estatal para la población viene de hace ya unos cuantos años, no es algo que
nos hayan traído como novedad ningún preboste, ni partido, como nos afirman a
veces, si bien es cierto que todos con
sus gobiernos han intentado mejorarlo en cada caso. Esas mejoras, como es lógico, incrementan el
gasto y surge el problema de la financiación.
Hasta hace pocos años había tres trabajadoras por cada pensionista, ahora
hay dos por jubilado, parece que la tendencia para unos años vista es un trabajador
por cada retirado y entonces es cuando con el actual sistema de reparto surge el
problema y van apareciendo las más variopintas ocurrencias para intentar
solucionarlo.
La Ministra
Bañez apuntó el otro día la posibilidad de que en un futuro próximo los
trabajadores al jubilarse puedan seguir trabajando y cobrando íntegramente su
pensión, cosa que actualmente se puede hacer cobrando la mitad de la paga, algunos, especialmente los de profesiones más llevaderas con los años, la han aplaudido y otros se la han tirado a la
yugular como el Secretario del UGT que ha tachado la iniciativa como una broma
de mal gusto.
Si tenemos en
cuenta que las pensiones nacieron como una forma de protección y sustento del
trabajador para cuando cesara su remuneración por el trabajo, evidentemente es contradictorio que se pague
dicha prestación a quien sigue trabajando. Por otra parte dada la precaria
situación de las arcas de la Seguridad Social, conviene incentivar para que
haya la mayor cantidad de gente posible dada de alta y cotizando. Claro que
esto también puede tener un problema añadido: esos trabajos que harían los que
ya están cobrando su pensión podrían ir
en detrimento, no sabemos hasta qué punto, en el aumento del paro juvenil.
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